A través de la presente investigación, ha quedado claro que la llegada de Internet y la introducción de dispositivos móviles han hecho que el público más joven prefiera consumir el cine en otras pantallas distintas a las de las salas de cine y de la televisión. De esta forma, optan por un consumo más cómodo e individualizado, desde el sofá de casa, cómo y dónde quieran y, sobre todo, con la posibilidad de elegir entre una gran variedad de películas y cine online que ofrecen los catálogos de los diversos portales de cine digital en la red.

Todo ello, ha generado que varias empresas vean una oportunidad en el auge de las tecnologías y el cine, y han pasado de comercializar DVDs a ofrecer contenidos audiovisuales a través de Internet, tanto películas como series de ficción.

Precisamente sobre estas plataformas -tales como Filmin o Netflix anteriormente estudiadas- hemos planteado la hipótesis de nuestra investigación y que vamos a recordar a continuación:

«Las nuevas plataformas surgidas a raíz de la aparición de las nuevas tecnologías y que ofrecen cine digital a través de internet no son, por el momento, rentables en España, ya que viven a la sombra de la piratería y de las tradicionales salas de cine».

Con todo lo estudiado, podemos llegar a la conclusión de que vivimos en un nuevo escenario cinematográfico en el que los jóvenes conocen y usan estas plataformas digitales, tal y como refleja la encuesta realizada para este estudio. Sin embargo, hay un porcentaje alto que no las conoce ni las usa, lo que deja un vacío que indica que la piratería en nuestro país es un fenómeno emergente y preocupante para la industria del cine.

Es precisamente la piratería y la continua tradición de acudir a las salas de cine lo que impide el desarrollo completo de este tipo de portales que ofrece cine en internet y cuya rentabilidad aún está en entredicho. Éstas siguen aprovechando las ventajas que les aportan las nuevas tecnologías, pero en España sigue ganando lo gratuito frente a lo pagado.

Así pues, podemos decir que nuestra hipótesis es acertada, pues aunque cada vez estas plataformas van adquiriendo más éxito y suscriptores, la cultura de nuestro país impide un desarrollo económico completo.

A pesar de ello, estos portales de cine digital podrían ser el futuro de una industria en constante cambio.